22 mayo 2009

EL FÉNIX

Tus ojos brillan y antes brillaban, pero no igual, ¿Qué les pasa?

Antes tenías el cielo en tus ojos, de día brillaba el sol y de noche miles de estrellas destellaban en tus pupilas negras. Ahora un río de destellos brotan y negra noche veo en ellos.

Sonrosadas mejillas nacían en tu cara igual que florecen las flores en primavera, todos los días, a todas las horas, de alegres colores todas ellas. Ahora, solemne expresión hay en tu triste rostro, un velo de luto se ve en él por ese amor que en tu corazón ha muerto.

Resplandeciente de energía estabas, de ella toda entera te rodeabas, en una nube de algodón andabas, bailabas y soñabas; hasta que un rayo como un puñal en tu corazón se clavó, todo lo que tenías dentro te sacó y llenos de dolor sus trocitos dejó, de tu nube te caíste, todo el cuerpo de magulladuras te llenaste y tus dulces sueños en las más terribles pesadillas se convirtieron tanto de noche como de día.

Esos amaneceres cual paleta de colores del mejor de los pintores, esos mares y cielos azules que se confunden en uno, esas verdes praderas de las que emana frescura y juventud, y esos anaranjados atardeceres cual campos de Valencia, todas esas joyas naturales se las llevaron con sus aguas esas negras nubes de tormenta, entre truenos y chubascos que fueron calando en tu ser, que te empaparon hasta lo más hondo, tu corazón despedazaron igual como las olas erosionan hasta el acantilado más duro, te despojaron de todas tus cosas, tus recuerdos, tus sonrisas, tus alegrías, tus esperanzas, tus deseos, tus planes y tu futuro, dejándote empapada en un charco lleno de barro, donde ya no puedes seguir hundiéndote ni aprovechar todas tus cosas inservibles llenas de barro; ya sólo queda esperar otra vez al sol, que nos seque nuestros trapos andrajosos, los lavaremos con nuestros mejores jabones, los secaremos bajo un sol cálido y acogedor y nos los volveremos a poner adornándolos con la mejor de nuestras sonrisas, resurgiremos de nuestras cenizas cual ave fénix, que resurge espléndido con sus mejores galas tras salir de la nada.

Ana María Castán García (9/12/2006)

2 comentarios:

garbed dijo...

Chabalota! un texto precioso...
Son increíbles las "casualidades" o como las queramos llamar.. pero el texto lo escribiste el 09.12.06 si no me equivoco... Es el día de mi cumpleaños.. y te puedo asegurar que en el 2006 yo me hubiera sentido muy identificada con lo escrito... me encanta Ana, sigue escribiendo.. te quiero ninia! estoy deseando veros a ti y a la pequeña.

Un besazo

Bea

acastaga dijo...

Nosotras también te queremos. Besos.